domingo, 28 de marzo de 2010

REGLAMENTO INTERNO DE TRABAJO

REGLAMENTO INTERNO DE TRABAJO


CAPÍTULO I

ART. 1º—El presente reglamento interno de trabajo prescrito por la empresa SEGOVIA MINERA GOLD S.A.S domiciliada en Municipio de Segovia Antioquia y a sus disposiciones quedan sometidas tanto la empresa como todos sus trabajadores. Este reglamento hace parte de los contratos individuales de trabajo, celebrados o que se celebren con todos los trabajadores, salvo estipulaciones en contrario, que sin embargo sólo pueden ser favorables al trabajador.

CAPÍTULO II
Condiciones de admisión

ART. 2º—Quien aspire a desempeñar un cargo en la empresa SEGOVIA MINERA GOLD S.A.S debe hacer la solicitud por escrito para su registro como aspirante y acompañar los siguientes documentos:
a) Cédula de ciudadanía o tarjeta de identidad según sea el caso.

b) Autorización escrita del Ministerio de la Protección Social o en su defecto la primera autoridad local, a solicitud de los padres y, a falta de estos, el defensor de familia, cuando el aspirante sea menor de dieciocho (18) años.


c) Certificado de personas honorables sobre su conducta y capacidad y en su caso del plantel de educación donde hubiere estudiado.

PAR.—El empleador podrá establecer en el reglamento, además de los documentos mencionados, todos aquellos que considere necesarios para admitir o no admitir al aspirante sin embargo, tales exigencias no deben incluir documentos, certificaciones o datos prohibidos expresamente por las normas jurídicas para tal efecto así, es prohibida la exigencia de la inclusión en formatos o cartas de solicitud de empleo “datos acerca del estado civil de las personas, número de hijos que tenga, la religión que profesan o el partido político al cual pertenezca” (L. 13/72, art. 1º); lo mismo que la exigencia de la prueba de gravidez para las mujeres, solo que se trate de actividades catalogadas como de alto riesgo (art. 43, C.N., arts. 1º y 2º, Convenio Nº 111 de la OIT, Res. 3941/94 del Mintrabajo), el examen de sida (D.R. 559/91, art. 22), ni la libreta militar (D. 2150/95, art. 111).

Período de prueba
ART. 3º—La empresa una vez admitido el aspirante podrá estipular con él un período inicial de prueba que tendrá por objeto apreciar por parte de la empresa, las aptitudes del trabajador y por parte de este, las conveniencias de las condiciones de trabajo (CST, art. 76).

ART. 4º—El período de prueba debe ser estipulado por escrito y en caso contrario los servicios se entienden regulados por las normas generales del contrato de trabajo (CST, art. 77, num. 1º).

ART. 5º—El período de prueba no puede exceder de dos (2) meses. En los contratos de trabajo a término fijo, cuya duración sea inferior a 1 año, el período de prueba no podrá ser superior a la quinta parte del término inicialmente pactado para el respectivo contrato, sin que pueda exceder de dos meses.

Cuando entre un mismo empleador y trabajador se celebren contratos de trabajo sucesivos, no es válida la estipulación del período de prueba, salvo para el primer contrato (L. 50/90, art. 7º).

ART. 6º—Durante el período de prueba, el contrato puede darse por terminado unilateralmente en cualquier momento y sin previo aviso, pero si expirado el período de prueba y el trabajador continuare al servicio del empleador, con consentimiento expreso o tácito, por ese solo hecho, los servicios prestados por aquel a este, se considerarán regulados por las normas del contrato de trabajo desde la iniciación de dicho período de prueba. Los trabajadores en período de prueba gozan de todas las prestaciones (CST, art. 80).

CAPÍTULO III
Trabajadores accidentales o transitorios

ART. 7º—Son meros trabajadores accidentales o transitorios, los que se ocupen en labores de corta duración no mayor de un mes y de índole distinta a las actividades normales de la empresa. Estos trabajadores tienen derecho, además del salario, al descanso remunerado en dominicales y festivos (CST, art. 6º).

CAPÍTULO IV
Horario de trabajo

ART. 8º—Las horas de entrada y salida de los trabajadores son las que a continuación se expresan así:
Días laborables. (Ejemplo: los días laborables para el personal administrativo son de lunes a sábado medio día y para el personal operativo de lunes a domingo).
Personal administrativo
Lunes a viernes
Mañana:
8:00 a.m. a 12:00 m.
Hora de almuerzo:
12:00 m. a 1:00 p.m.
Tarde:
1:00 p.m. a 5:00 p.m.
Sábado
Hora de entrada: 8: a.m
Hora de salida: 12: m
Con períodos de descanso de diez minutos en cada turno de tales a tales horas.
Personal operativo: por turnos rotativos
Primer turno:
6:00 a.m. a 2:00 p.m.
Segundo turno:
2:00 p.m. a 10:00 p.m.
Terser turno:
10:00 p.m. a 6:00 a.m.
Con períodos de descanso de diez minutos.

PAR.1°—Para las empresas que laboran el día domingo. Por cada domingo o festivo trabajado se reconocerá un día compensatorio remunerado a la semana siguiente.

PAR.2°—Cuando la empresa tenga más de cincuenta (50) trabajadores que laboren cuarenta y ocho (48) horas a la semana, estos tendrán derecho a que dos (2) horas de dicha jornada, por cuenta del empleador, se dediquen exclusivamente a actividades recreativas, culturales, deportivas o de capacitación (L. 50/90, art. 21).

PAR. 3º—Jornada laboral flexible. (L. 789/2002, art. 51) Modificó el inciso primero del literal C), incluyó el d) artículo 161 del Código Sustantivo del Trabajo.

c) El empleador y el trabajador pueden acordar temporal o indefinidamente la organización de turnos de trabajo sucesivos, que permitan operar a la empresa o secciones de la misma sin solución de continuidad durante todos los días de la semana, siempre y cuando el respectivo turno no exceda de seis (6) horas al día y treinta y seis (36) a la semana.

d) El empleador y el trabajador podrán acordar que la jornada semanal de cuarenta y ocho (48) horas se realice mediante jornadas diarias flexibles de trabajo, distribuidas en máximo seis días a la semana con un día de descanso obligatorio, que podrá coincidir con el domingo. En este, el número de horas de trabajo diario podrá repartirse de manera variable durante la respectiva semana y podrá ser de mínimo cuatro (4) horas continuas y hasta diez (10) horas diarias sin lugar a ningún recargo por trabajo suplementario, cuando el número de horas de trabajo no exceda el promedio de cuarenta y ocho (48) horas semanales dentro de la jornada ordinaria de 6 a.m. a 10 p.m. (L. 789/2002, art. 51).

CAPÍTULO V
Las horas extras y trabajo nocturno

ART. 9º—Trabajo ordinario y nocturno. Artículo 25 Ley 789 de 2002 que modificó el artículo 160 del Código Sustantivo del Trabajo quedará así:

1. Trabajo ordinario es el que se realiza entre las seis horas (6:00 a.m.) y las veintidós horas (10:00 p.m.).

2. Trabajo nocturno es el comprendido entre las veintidós horas (10:00 p.m.). y las seis horas (6:00 a.m.).

ART. 10.—Trabajo suplementario o de horas extras es el que se excede de la jornada ordinaria y en todo caso el que excede la máxima legal (CST, art. 159).

ART. 11.—El trabajo suplementario o de horas extras, a excepción de los casos señalados en el artículo 163 del Código Sustantivo del Trabajo, sólo podrá efectuarse en dos (2) horas diarias y mediante autorización expresa del Ministerio de la Protección Social o de una autoridad delegada por este (D. 13/67, art. 1º).

ART. 12.—Tasas y liquidación de recargos.
1. El trabajo nocturno, por el solo hecho de ser nocturno se remunera con un recargo del treinta y cinco por ciento (35%) sobre el valor del trabajo ordinario diurno, con excepción del caso de la jornada de treinta y seis (36) horas semanales prevista en el artículo 20 literal c) de la Ley 50 de 1990.

2. El trabajo extra diurno se remunera con un recargo del veinticinco por ciento (25%) sobre el valor del trabajo ordinario diurno.

3. El trabajo extra nocturno se remunera con un recargo del setenta y cinco por ciento (75%) sobre el valor del trabajo ordinario diurno.

4. Cada uno de los recargos antedichos se produce de manera exclusiva, es decir, sin acumularlo con alguno otro (L. 50/90, art. 24).

PAR.—La empresa podrá implantar turnos especiales de trabajo nocturno, de acuerdo con lo previsto por el Decreto 2352 de 1965.

ART. 13.—La empresa no reconocerá trabajo suplementario o de horas extras sino cuando expresamente lo autorice a sus trabajadores de acuerdo con lo establecido para tal efecto en el artículo 11 de este reglamento.

PAR. 1º—En ningún caso las horas extras de trabajo, diurnas o nocturnas, podrán exceder de dos (2) horas diarias y doce (12) semanales.

PAR. 2º—Descanso en día sábado. Pueden repartirse las cuarenta y ocho (48) horas semanales de trabajo ampliando la jornada ordinaria hasta por dos horas, por acuerdo entre las partes, pero con el fin exclusivo de permitir a los trabajadores el descanso durante todo el sábado. Esta ampliación no constituye trabajo suplementario o de horas extras.

CAPÍTULO VI
Días de descanso legalmente obligatorios

ART. 14.—Serán de descanso obligatorio remunerado, los domingos y días de fiesta que sean reconocidos como tales en nuestra legislación laboral.

1. Todo trabajador, tiene derecho al descanso remunerado en los siguientes días de fiesta de carácter civil o religioso: 1º de enero, 6 de enero, 19 de marzo, 1º de mayo, 29 de junio, 20 de julio, 7 de agosto, 15 de agosto, 12 de octubre, 1º de noviembre, 11 de noviembre, 8 y 25 de diciembre, además de los días jueves y viernes santos, Ascensión del Señor, Corpus Christi y Sagrado Corazón de Jesús.

2. Pero el descanso remunerado del seis de enero, diecinueve de marzo, veintinueve de junio, quince de agosto, doce de octubre, primero de noviembre, once de noviembre, Ascensión del Señor, Corpus Christi y Sagrado Corazón de Jesús, cuando no caigan en día lunes se trasladarán al lunes siguiente a dicho día. Cuando las mencionadas festividades caigan en domingo, el descanso remunerado, igualmente se trasladará al lunes.

3. Las prestaciones y derechos que para el trabajador originen el trabajo en los días festivos, se reconocerá en relación al día de descanso remunerado establecido en el inciso anterior (L. 51, art. 1º, dic. 22/83).

PAR. 1º—Cuando la jornada de trabajo convenida por las partes, en días u horas, no implique la prestación de servicios en todos los días laborables de la semana, el trabajador tendrá derecho a la remuneración del descanso dominical en proporción al tiempo laborado (L. 50/90, art. 26, num. 5º).

PAR. 2º—Trabajo dominical y festivo. (L. 789/2002, art. 26) modificó artículo 179 del Código Sustantivo del Trabajo.

1. El trabajo en domingo y festivos se remunerará con un recargo del setenta y cinco por ciento (75%) sobre el salario ordinario en proporción a las horas laboradas.

2. Si con el domingo coincide otro día de descanso remunerado sólo tendrá derecho el trabajador, si trabaja, al recargo establecido en el numeral anterior.

3. Se exceptúa el caso de la jornada de treinta y seis (36) horas semanales previstas en el artículo 20 literal c) de la Ley 50 de 1990 (L. 789/2002, art. 26).

PAR. 3.1.—El trabajador podrá convenir con el empleador su día de descanso obligatorio el día sábado o domingo, que será reconocido en todos sus aspectos como descanso dominical obligatorio institucionalizado.

Interprétese la expresión dominical contenida en el régimen laboral en este sentido exclusivamente para el efecto del descanso obligatorio.

Las disposiciones contenidas en los artículos 25 y 26 de la Ley 789 del 2002 se aplazarán en su aplicación frente a los contratos celebrados antes de la vigencia de la presente ley hasta el 1º de abril del año 2003.

Aviso sobre trabajo dominical. Cuando se tratare de trabajos habituales o permanentes en domingo, el empleador debe fijar en lugar público del establecimiento, con anticipación de 12 horas lo menos, la relación del personal de trabajadores que por razones del servicio no pueden disponer el descanso dominical. En esta relación se incluirán también el día y las horas de descanso compensatorio (CST, art. 185).

ART. 15.—El descanso en los días domingos y los demás días expresados en el artículo 21 de este reglamento, tiene una duración mínima de 24 horas, salvo la excepción consagrada en el literal c) del artículo 20 de la Ley 50 de 1990 (L. 50/90, art. 25).

ART. 16.—Cuando por motivo de fiesta no determinada en la Ley 51 del 22 de diciembre de 1983, la empresa suspendiere el trabajo, está obligada a pagarlo como si se hubiere realizado. No está obligada a pagarlo cuando hubiere mediado convenio expreso para la suspensión o compensación o estuviere prevista en el reglamento, pacto, convención colectiva o fallo arbitral. Este trabajo compensatorio se remunerará sin que se entienda como trabajo suplementario o de horas extras (CST, art. 178).

Vacaciones remuneradas
ART. 17.—Los trabajadores que hubieren prestado sus servicios durante un (1) año tienen derecho a quince (15) días hábiles consecutivos de vacaciones remuneradas (CST, art. 186, num. 1º).

ART. 18.—La época de vacaciones debe ser señalada por la empresa a más tardar dentro del año subsiguiente y ellas deben ser concedidas oficiosamente o a petición del trabajador, sin perjudicar el servicio y la efectividad del descanso.

El empleador tiene que dar a conocer al trabajador con 15 días de anticipación la fecha en que le concederán las vacaciones (CST, art. 187).

ART. 19.—Si se presenta interrupción justificada en el disfrute de las vacaciones, el trabajador no pierde el derecho a reanudarlas (CST, art. 188).

ART. 20.—Se prohíbe compensar las vacaciones en dinero, pero el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social puede autorizar que se pague en dinero hasta la mitad de ellas en casos especiales de perjuicio para la economía nacional o la industria; cuando el contrato termina sin que el trabajador hubiere disfrutado de vacaciones, la compensación de estas en dinero procederá por un año cumplido de servicios y proporcionalmente por fracción de año. En todo caso para la compensación de vacaciones, se tendrá como base el último salario devengado por el trabajador (CST, art. 189).

ART. 21.—En todo caso, el trabajador gozará anualmente, por lo menos de seis (6) días hábiles continuos de vacaciones, los que no son acumulables.
Las partes pueden convenir en acumular los días restantes de vacaciones hasta por 2 años.

La acumulación puede ser hasta por 4 años, cuando se trate de trabajadores técnicos, especializados, y de confianza (CST, art. 190).

ART. 22.—Durante el período de vacaciones el trabajador recibirá el salario ordinario que esté devengando el día que comience a disfrutar de ellas. En consecuencia, sólo se excluirán para la liquidación de las vacaciones el valor del trabajo en días de descanso obligatorio y el valor del trabajo suplementario o de horas extras. Cuando el salario sea variable, las vacaciones se liquidarán con el promedio de lo devengado por el trabajador en el año inmediatamente anterior a la fecha en que se concedan.

ART. 23.—Todo empleador llevará un registro de vacaciones en el que se anotará la fecha de ingreso de cada trabajador, fecha en que toma sus vacaciones, en que las termina y la remuneración de las mismas (D. 13/67, art. 5º).

PAR.—En los contratos a término fijo inferior a un (1) año, los trabajadores tendrán derecho al pago de vacaciones en proporción al tiempo laborado cualquiera que este sea (L. 50/90, art. 3º, par.).

Permisos
ART. 24.—La empresa concederá a sus trabajadores los permisos necesarios para el ejercicio del derecho al sufragio y para el desempeño de cargos oficiales transitorios de forzosa aceptación, en caso de grave calamidad doméstica debidamente comprobada, para concurrir en su caso al servicio médico correspondiente, para desempeñar comisiones sindicales inherentes a la organización y para asistir al entierro de sus compañeros, siempre que avisen con la debida oportunidad a la empresa y a sus representantes y que en los dos últimos casos, el número de los que se ausenten no sea tal, que perjudiquen el funcionamiento del establecimiento. La concesión de los permisos antes dichos estará sujeta a las siguientes condiciones:

En caso de grave calamidad doméstica, la oportunidad del aviso puede ser anterior o posterior al hecho que lo constituye o al tiempo de ocurrir este, según lo permitan las circunstancias.

En caso de entierro de compañeros de trabajo, el aviso puede ser hasta con un día de anticipación y el permiso se concederá hasta el 10% de los trabajadores.

En los demás casos (sufragio, desempeño de cargos transitorios de forzosa aceptación y concurrencia al servicio médico correspondiente) el aviso se hará con la anticipación que las circunstancias lo permitan. Salvo convención en contrario y a excepción del caso de concurrencia al servicio médico correspondiente, el tiempo empleado en estos permisos puede descontarse al trabajador o compensarse con tiempo igual de trabajo efectivo en horas distintas a su jornada ordinaria, a opción de la empresa (CST, art. 57, num. 6º).

CAPÍTULO VII

Salario mínimo, convencional, lugar, días, horas de pagos y períodos que lo regulan

ART. 25.—Formas y libertad de estipulación:

1. El empleador y el trabajador pueden convenir libremente el salario en sus diversas modalidades como por unidad de tiempo, por obra, o a destajo y por tarea, etc., pero siempre respetando el salario mínimo legal o el fijado en los pactos, convenciones colectivas y fallos arbitrales.

2. No obstante lo dispuesto en los artículos 13, 14, 16, 21 y 340 del Código Sustantivo del Trabajo y las normas concordantes con estas, cuando el trabajador devengue un salario ordinario superior a diez (10) salarios mínimos legales mensuales, valdrá la estipulación escrita de un salario que además de retribuir el trabajo ordinario, compense de antemano el valor de prestaciones, recargos y beneficios tales como el correspondiente al trabajo nocturno, extraordinario o al dominical y festivo, el de primas legales, extralegales, las cesantías y sus intereses, subsidios y suministros en especie; y, en general, las que se incluyan en dicha estipulación, excepto las vacaciones.

En ningún caso el salario integral podrá ser inferior al monto de 10 salarios mínimos legales mensuales, más el factor prestacional correspondiente a la empresa que no podrá ser inferior al treinta por ciento (30%) de dicha cuantía.

3. Este salario no estará exento de las cotizaciones a la seguridad social, ni de los aportes al SENA, ICBF, y cajas de compensación familiar, pero la base para efectuar los aportes parafiscales es el setenta por ciento (70%).

4. El trabajador que desee acogerse a esta estipulación, recibirá la liquidación definitiva de su auxilio de cesantía y demás prestaciones sociales causadas hasta esa fecha, sin que por ello se entienda terminado su contrato de trabajo (L. 50/90, art. 18).

ART. 26.—Se denomina jornal el salario estipulado por días y sueldo, el estipulado con períodos mayores (CST, art. 133).

ART. 27.—Salvo convenio por escrito, el pago de los salarios se efectuará en el lugar en donde el trabajador presta sus servicios durante el trabajo, o inmediatamente después del cese (CST, art. 138, num. 1º).
Períodos de pago:
Ejemplo: quincenales mensuales (uno de los dos o los dos).

ART. 28.—El salario se pagará al trabajador directamente o a la persona que él autorice por escrito así:

1. El salario en dinero debe pagarse por períodos iguales y vencidos. El período de pago para los jornales no puede ser mayores de una semana, y para sueldos no mayor de un mes.

2. El pago del trabajo suplementario o de horas extras y el recargo por trabajo nocturno debe efectuarse junto con el salario ordinario del período en que se han causado o a más tardar con el salario del período siguiente (CST, art. 134).


CAPÍTULO VIII
Servicio médico, medidas de seguridad, riesgos profesionales, primeros auxilios en caso de accidentes de trabajo, normas sobre labores en orden a la mayor higiene, regularidad y seguridad en el trabajo.

ART. 29.—Es obligación del empleador velar por la salud, seguridad e higiene de los trabajadores a su cargo. Igualmente, es su obligación garantizar los recursos necesarios para implementar y ejecutar actividades permanentes en medicina preventiva y del trabajo, y en higiene y seguridad industrial, de conformidad al programa de salud ocupacional, y con el objeto de velar por la protección integral del trabajador.

ART. 30.—Los servicios médicos que requieran los trabajadores se prestarán por el Instituto de Seguros Sociales o EPS, ARP, a través de la IPS a la cual se encuentren asignados. En caso de no afiliación estará a cargo del empleador sin perjuicio de las acciones legales pertinentes.

ART. 31.—Todo trabajador dentro del mismo día en que se sienta enfermo deberá comunicarlo al empleador, su representante o a quien haga sus veces el cual hará lo conducente para que sea examinado por el médico correspondiente a fin de que certifique si puede continuar o no en el trabajo y en su caso determine la incapacidad y el tratamiento a que el trabajador debe someterse. Si este no diere aviso dentro del término indicado o no se sometiere al examen médico que se haya ordenado, su inasistencia al trabajo se tendrá como injustificada para los efectos a que haya lugar, a menos que demuestre que estuvo en absoluta imposibilidad para dar el aviso y someterse al examen en la oportunidad debida.

ART. 32.—Los trabajadores deben someterse a las instrucciones y tratamiento que ordena el médico que los haya examinado, así como a los exámenes y tratamientos preventivos que para todos o algunos de ellos ordena la empresa en determinados casos. El trabajador que sin justa causa se negare a someterse a los exámenes, instrucciones o tratamientos antes indicados, perderá el derecho a la prestación en dinero por la incapacidad que sobrevenga a consecuencia de esa negativa.

ART. 33.—Los trabajadores deberán someterse a todas las medidas de higiene y seguridad que prescriban las autoridades del ramo en general, y en particular a las que ordene la empresa para prevención de las enfermedades y de los riesgos en el manejo de las máquinas y demás elementos de trabajo especialmente para evitar los accidentes de trabajo.

PAR.—El grave incumplimiento por parte del trabajador de las instrucciones, reglamentos y determinaciones de prevención de riesgos, adoptados en forma general o específica, y que se encuentren dentro del programa de salud ocupacional de la respectiva empresa, que la hayan comunicado por escrito, facultan al empleador para la terminación del vínculo o relación laboral por justa causa, tanto para los trabajadores privados como los servidores públicos, previa autorización del Ministerio de la Protección Social, respetando el derecho de defensa (D. 1295/94, art. 91).

ART. 34.—En caso de accidente de trabajo, el jefe de la respectiva dependencia, o su representante, ordenará inmediatamente la prestación de los primeros auxilios, la remisión al médico y tomará todas las medidas que se consideren necesarias y suficientes para reducir al mínimo, las consecuencias del accidente, denunciando el mismo en los términos establecidos en el Decreto 1295 de 1994 ante la EPS y la ARP.

ART. 35.—En caso de accidente no mortal, aun el más leve o de apariencia insignificante, el trabajador lo comunicará inmediatamente al empleador, a su representante o a quien haga sus veces, para que se provea la asistencia médica y tratamiento oportuno según las disposiciones legales vigentes, indicará, las consecuencias del accidente y la fecha en que cese la incapacidad.

ART. 36.—Todas las empresas y las entidades administradoras de riesgos profesionales deberán llevar estadísticas de los accidentes de trabajo y de las enfermedades profesionales para lo cual deberán en cada caso determinar la gravedad y la frecuencia de los accidentes de trabajo o de las enfermedades profesionales de conformidad con el reglamento que se expida.

Todo accidente de trabajo o enfermedad profesional que ocurra en una empresa o actividad económica, deberá ser informado por el empleador a la entidad administradora de riesgos profesionales y a la entidad promotora de salud, en forma simultánea, dentro de los dos días hábiles siguientes de ocurrido el accidente o diagnosticada la enfermedad.

ART. 37.—En todo caso, en lo referente a los puntos de que trata este capítulo, tanto la empresa como los trabajadores, se someterán a las normas de riesgos profesionales del Código Sustantivo del Trabajo, a la Resolución 1016 de 1989 expedida por el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social y las demás que con tal fin se establezcan. De la misma manera ambas partes están obligadas a sujetarse al Decreto-Ley 1295 de 1994, y la Ley 776 del 17 de diciembre de 2002, del sistema general de riesgos profesionales, de conformidad con los términos estipulados en los preceptos legales pertinentes y demás normas concordantes y reglamentarias antes mencionadas.

CAPÍTULO IX
Prescripciones de orden

ART. 38.—Los trabajadores tienen como deberes los siguientes:
a) Respeto y subordinación a los superiores.
b) Respeto a sus compañeros de trabajo.
c) Procurar completa armonía con sus superiores y compañeros de trabajo en las relaciones personales y en la ejecución de labores.
d) Guardar buena conducta en todo sentido y obrar con espíritu de leal colaboración en el orden moral y disciplina general de la empresa.
e) Ejecutar los trabajos que le confíen con honradez, buena voluntad y de la mejor manera posible.
f) Hacer las observaciones, reclamos y solicitudes a que haya lugar por conducto del respectivo superior y de manera fundada, comedida y respetuosa.
g) Recibir y aceptar las órdenes, instrucciones y correcciones relacionadas con el trabajo, con su verdadera intención que es en todo caso la de encaminar y perfeccionar los esfuerzos en provecho propio y de la empresa en general.
h) Observar rigurosamente las medidas y precauciones que le indique su respectivo jefe para el manejo de las máquinas o instrumentos de trabajo.
i) Permanecer durante la jornada de trabajo en el sitio o lugar en donde debe desempeñar las labores siendo prohibido salvo orden superior, pasar al puesto de trabajo de otros compañeros.

CAPÍTULO X
Orden jerárquico

ART. 39.—El orden jerárquico de acuerdo con los cargos existentes en la empresa, es el siguiente: Junta de Accionistas, Gerente General, Administrador y Director de Talento Humano y Secretaria.

PAR.—De los cargos mencionados, tienen facultades para imponer sanciones disciplinarias a los trabajadores de la empresa: el Gerente General,

CAPÍTULO XI
Labores prohibidas para mujeres y menores

ART. 40.—Queda prohibido emplear a los menores de dieciocho (18) años y a las mujeres en trabajo de pintura industrial, que entrañen el empleo de la cerusa, del sulfato de plomo o de cualquier otro producto que contenga dichos pigmentos. Las mujeres sin distinción de edad y los menores de dieciocho (18) años no pueden ser empleados en trabajos subterráneos de las minas ni en general trabajar en labores peligrosas, insalubres o que requieran grandes esfuerzos (CST, art. 242, ords. 2º y 3º).

ART. 41.—Los menores no podrán ser empleados en los trabajos que a continuación se enumeran, por cuanto suponen exposición severa a riesgos para su salud o integridad física:
1. Trabajos que tengan que ver con sustancias tóxicas o nocivas para la salud.
2. Trabajos a temperaturas anormales o en ambientes contaminados o con insuficiente ventilación.
3. Trabajos subterráneos de minería de toda índole y en los que confluyen agentes nocivos, tales como contaminantes, desequilibrios térmicos, deficiencia de oxígeno a consecuencia de la oxidación o la gasificación.
4. Trabajos donde el menor de edad está expuesto a ruidos que sobrepasen ochenta (80) decibeles.
5. Trabajos donde se tenga que manipular con sustancias radiactivas, pinturas luminiscentes, rayos X, o que impliquen exposición a radiaciones ultravioletas, infrarrojas y emisiones de radiofrecuencia.
6. Todo tipo de labores que impliquen exposición a corrientes eléctricas de alto voltaje.
7. Trabajos submarinos.
8. Trabajo en basurero o en cualquier otro tipo de actividades donde se generen agentes biológicos patógenos.
9. Actividades que impliquen el manejo de sustancias explosivas, inflamables o cáusticas.
10. Trabajos en pañoleros o fogoneros, en los buques de transporte marítimo.
11. Trabajos en pintura industrial que entrañen el empleo de la cerusa, del sulfato de plomo o de cualquier otro producto que contenga dichos elementos.
12. Trabajos en máquinas esmeriladoras, afilado de herramientas, en muelas abrasivas de alta velocidad y en ocupaciones similares.
13. Trabajos en altos hornos, horno de fundición de metales, fábrica de acero, talleres de laminación, trabajos de forja, y en prensa pesada de metales.
14. Trabajos y operaciones que involucren la manipulación de cargas pesadas.
15. Trabajos relacionados con cambios de correas de transmisión, aceite, engrasado y otros trabajos próximos a transmisiones pesadas o de alta velocidad.
16. Trabajos en cizalladoras, cortadoras, laminadoras, tornos, fresadoras, troqueladoras, otras máquinas particularmente peligrosas.
17. Trabajos de vidrio y alfarería, trituración y mezclado de materia prima, trabajo de hornos, pulido y esmerilado en seco de vidriería, operaciones de limpieza por chorro de arena, trabajo en locales de vidriado y grabado, trabajos en la industria cerámica.
18. Trabajo de soldadura de gas y arco, corte con oxígeno en tanques o lugares confinados, en andamios o en molduras precalentadas.
19. Trabajos en fábricas de ladrillos, tubos y similares, moldeado de ladrillos a mano, trabajo en las prensas y hornos de ladrillos.
20. Trabajo en aquellas operaciones y/o procesos en donde se presenten altas temperaturas y humedad.
21. Trabajo en la industria metalúrgica de hierro y demás metales, en las operaciones y/o procesos donde se desprenden vapores o polvos tóxicos y en plantas de cemento.
22. Actividades agrícolas o agroindustriales que impliquen alto riesgo para la salud.
23. Las demás que señalen en forma específica los reglamentos del Ministerio de la Protección Social.

PAR.—Los trabajadores menores de 18 años y mayores de catorce 14, que cursen estudios técnicos en el Servicio Nacional de Aprendizaje o en un instituto técnico especializado reconocido por el Ministerio de Educación Nacional o en una institución del sistema nacional de bienestar familiar autorizada para el efecto por el Ministerio de la Protección Social, o que obtenga el certificado de aptitud profesional expedido por el Servicio Nacional de Aprendizaje “SENA”, podrán ser empleados en aquellas operaciones, ocupaciones o procedimientos señalados en este artículo, que a juicio del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, pueden ser desempeñados sin grave riesgo para la salud o la integridad física del menor mediante un adecuado entrenamiento y la aplicación de medidas de seguridad que garanticen plenamente la prevención de los riesgos anotados. Quedan prohibidos a los trabajadores menores de 18 años todo trabajo que afecte su moralidad. En especial le está prohibido el trabajo en casas de lenocinio y demás lugares de diversión donde se consuman bebidas alcohólicas. De igual modo se prohíbe su contratación para la reproducción de escenas pornográficas, muertes violentas, apología del delito u otros semejantes (D. 2737/89, arts. 245 y 246).

Queda prohibido el trabajo nocturno para los trabajadores menores, no obstante los mayores de dieciséis (16) años y menores de dieciocho (18) años podrán ser autorizados para trabajar hasta las ocho (8) de la noche siempre que no se afecte su asistencia regular en un centro docente, ni implique perjuicio para su salud física o moral (D. 2737/89, art. 243) .

CAPÍTULO XII
Obligaciones especiales para la empresa y los trabajadores

ART. 42.—Son obligaciones especiales del empleador:
1. Poner a disposición de los trabajadores, salvo estipulaciones en contrario, los instrumentos adecuados y las materias primas necesarias para la realización de las labores.
2. Procurar a los trabajadores locales apropiados y elementos adecuados de protección contra accidentes y enfermedades profesionales en forma que se garanticen razonablemente la seguridad y la salud.
3. Prestar de inmediato los primeros auxilios en caso de accidentes o enfermedad. Para este efecto, el establecimiento mantendrá lo necesario según reglamentación de las autoridades sanitarias.
4. Pagar la remuneración pactada en las condiciones, períodos y lugares convenidos.
5. Guardar absoluto respeto a la dignidad personal del trabajador y sus creencias y sentimientos.
6. Conceder al trabajador las licencias necesarias para los fines y en los términos indicados en el artículo 24 de este reglamento.
7. Dar al trabajador que lo solicite, a la expiración del contrato, una certificación en que conste el tiempo de servicio, índole de la labor y salario devengado, e igualmente si el trabajador lo solicita, hacerle practicar examen sanitario y darle certificación sobre el particular, si al ingreso o durante la permanencia en el trabajo hubiere sido sometido a examen médico. Se considerará que el trabajador por su culpa elude, dificulta o dilata el examen, cuando transcurridos 5 días a partir de su retiro no se presenta donde el médico respectivo para las prácticas del examen, a pesar de haber recibido la orden correspondiente.
8. Pagar al trabajador los gastos razonables de venida y regreso, si para prestar su servicio lo hizo cambiar de residencia, salvo si la terminación del contrato se origina por culpa o voluntad del trabajador.
Si el trabajador prefiere radicarse en otro lugar, el empleador le debe costear su traslado hasta concurrencia de los gastos que demandaría su regreso al lugar donde residía anteriormente. En los gastos de traslado del trabajador se entienden comprendidos los familiares que con él convivieren.
9. Abrir y llevar al día los registros de horas extras.
10. Conceder a las trabajadoras que estén en período de lactancia los descansos ordenados por el artículo 238 del Código Sustantivo del Trabajo.
11. Conservar el puesto a los trabajadores que estén disfrutando de los descansos remunerados, a que se refiere el numeral anterior, o de licencia de enfermedad motivada por el embarazo o parto. No producirá efecto alguno el despido que el empleador comunique a la trabajadora en tales períodos o que si acude a un preaviso, este expire durante los descansos o licencias mencionadas.
12. Llevar un registro de inscripción de todas las personas menores de edad que emplee, con indicación de la fecha de nacimiento de las mismas.
13. Cumplir este reglamento y mantener el orden, la moralidad y el respeto a las leyes.
14. Además de las obligaciones especiales a cargo del empleador, este garantizará el acceso del trabajador menor de edad a la capacitación laboral y concederá licencia no remunerada cuando la actividad escolar así lo requiera. Será también obligación de su parte, afiliarlo al Sistema de Seguridad Social Integral, suministrarles cada 4 meses en forma gratuita, un par de zapatos y un vestido de labor, teniendo en cuenta que la remuneración mensual sea hasta dos veces el salario mínimo vigente en la empresa (CST, art. 57).

ART. 43.—Son obligaciones especiales del trabajador las siguientes:

1). Prestar sus servicios de manera puntual, cuidadosa y diligente en el lugar y condiciones acordadas.
2). Ejecutar personalmente el trabajo propio de su cargo; observar los preceptos de los reglamentos, manuales, circulares, etc., de la Empresa, y en general acatar y cumplir las órdenes disciplinarias e instrucciones que de modo particular le impartan el representante de la Empresa o los empleados que hagan sus veces, según el orden jerárquico establecido.
3). No comunicar a terceros, salvo autorización expresa, las informaciones que tenga sobre su trabajo, especialmente sobre los casos que sean de naturaleza reservada o cuya divulgación pueda ocasionar perjuicios a la Empresa , lo que no obsta para denunciar delitos comunes o violaciones del contrato o de las normas legales del trabajo ante las autoridades competentes. En consecuencia el trabajador evitará principalmente hablar con personas extrañas a la Empresa de asuntos relacionados con la organización interna de la misma, manteniendo en reserva cualquier dato obtenido o que llegue a su conocimiento por razón de su oficio, y no retirar de los archivos de la Empresa, sin previo permiso del representante de ésta, documento alguno no darlos a conocer a ninguna persona.
4).Conservar y restituir en buen estado, salvo el deterioro normal y natural, los instrumentos y útiles que le hayan sido facilitados y las materias primas sobrantes, así como los productos elaborados y utilizar debidamente los elementos de protección personal, que se le hayan dado para su trabajo.
5). Guardar rigurosamente la moral en las relaciones con sus superiores y compañeros.
6). Comunicar oportunamente a su respectivo superior las observaciones y sugerencias necesarias para evitar daños y perjuicios a los intereses de la Empresa o de su personal.
7). Prestar la colaboración posible en caso de siniestro o de riesgo inminente que afecte, amenace o perjudique a las personas o a la maquinaria de la Empresa.
8). Impedir el desperdicio de materiales y procurar el mayor rendimiento en el desempeño de sus labores.
9). Observar las medidas preventivas o higiénicas prescritas por el médico o por las autoridades del ramo.
10). Observar con suma diligencia y cuidado las instrucciones y órdenes preventivas de accidente o enfermedades profesionales.
11). Cumplir fielmente las disposiciones del presente Reglamento de Trabajo aprobado por las autoridades del ramo. Así como las demás normas que resulten de la naturaleza el contrato o que estén previstas en las disposiciones legales.
12). Dar pleno rendimiento en el desempeño de sus labores y laborar de manera efectiva la jornada reglamentaria.
13). Asistir con puntualidad al trabajo, según el horario correspondiente.
14). Someterse a todas las medidas de control que establezca la Empresa a fin de obtener la puntual asistencia general y para evitar o descubrir maniobras indebidas que pueda efectuar algún trabajador.
15). Marcar por sí mismo la tarjeta de control a las horas de entrada y salida, así como en el momento de salir de la Empresa con el permiso del caso y en el momento de regreso.
16). Observar estrictamente lo establecido por la Empresa para solicitud de permisos y para avisos y comprobación de enfermedad, de ausencias y de novedades semejantes.
17). Laborar en horas extras legalmente exigibles, cuando así lo exija la Empresa por razones de trabajo.
18). Usar las máquinas, herramientas, útiles y elementos sólo en beneficio de la Empresa.
19). Procurar que las máquinas y equipos den el máximo rendimiento y el mínimo desperdicio, así como dar aviso inmediato sobre los daños notados en ellos.
20). Portar el carné de identificación que otorga la Empresa y presentarlo en todas las ocasiones en que le sea pedido por razones de cualquier control y para entrar a algunas dependencias o para salir de ellas.
21). Someterse a los controles indicados por la Empresa, en la forma, día y hora que ella señale, para evitar sustracciones u otras irregularidades.
22). Asistir con puntualidad y provecho a los cursos especiales de capacitación, entrenamiento o perfeccionamiento organizadas e indicados por la Empresa dentro o fuera del recinto, cuando éstos se realicen dentro de la Jornada Laboral..
23). Concurrir cumplidamente a las reuniones generales o de grupos, organizadas y convocadas por la Empresa, cuando éstos se realicen dentro de la Jornada Laboral.
24). Cumplir estrictamente los compromisos de orden económico o semejante adquiridos por el trabajador con la Empresa.
25). Evitar cualquier acción u omisión que pueda conducir a cualquier persona o entidad a formular reparos ante la Empresa por la conducta y el cumplimiento del trabajador
26). Evitar que personas extrañas utilicen los servicios y beneficios destinados por la Empresa a sus trabajadores y a sus familiares.
27). Observar estrictamente el conducto regular en sus relaciones con la Empresa.
28). Los demás que resulten de la naturaleza del Contrato de Trabajo.

Obligaciones especiales para los jefes de departamento o de sección o supervisores.
Además de las obligaciones que rigen para los demás trabajadores, son especiales para los jefes de Departamento o sección Gerentes y Supervisores las siguientes:
1.-Las de obediencia y especial fidelidad para con la Empresa
2). Planear, organizar, dirigir, coordinar, controlar e impulsar cumplidamente a las reuniones generales o de grupos, organizadas y convocadas por la Empresa.
3). Aplicar la política, los reglamentos, las normas y procedimientos de la Empresa,
4). Mantener la disciplina dentro del grupo puesto bajo sus órdenes.
5). Informar y consultar a sus propios superiores sobre los problemas que puedan surgir en el trabajo.
6). Prestar plena colaboración a la Empresa y en especial a los demás jefes de diversos niveles y directivos de la Empresa.
7). Impulsar el trabajo en equipo, estimulando la cooperación de todo el personal.
8). Dar ejemplo con su propia conducta.
9). Las demás que se deducen del carácter que todo jefe de departamento o sección o supervisor tiene como empleado de dirección y de especial confianza dentro de la Empresa.

Obligaciones de los Vigilantes y Celadores.

Además de las obligaciones que rigen para los demás trabajadores, son especiales de los vigilantes o celadores, las siguientes:
1). Ser rigurosamente estricto en el cumplimiento de los turnos y horarios de trabajo.
2). Recibir órdenes exclusivamente de sus propios jefes y de los directivos de la Empresa.
3). Usar en forma indicada por la Empresa los uniformes propios del oficio de la Empresa.
4). Permanecer alerta en todo momento para la vigilancia y cuidado de las personas y de todos los bienes de la Empresa, y mantenerse siempre en el puesto asignado.
5). Cumplir estrictamente las instrucciones generales y especiales de los jefes, para el control de los lugares de acceso, para registro de personas y de objetos, para exigencia de documentos de identidad, para realización de requisas y para las demás actividades de su oficio.

6). Informar sin falta a sus jefes y a la Empresa sobre hechos u omisiones de cualquiera persona, si ello tiene alguna relación con la seguridad y buena marcha de la Empresa.
7). Prestar plena cooperación a la empresa y a sus jefes para todo lo que represente seguridad de la Empresa; y
8). Todas las demás que se deriven del carácter que tiene todo vigilante o celador como empleado especial de confianza dentro de la Empresa.

ART. 44.—Se prohíbe a la empresa:
1. Deducir, retener o compensar suma alguna del monto de los salarios y prestaciones en dinero que corresponda a los trabajadores sin autorización previa escrita de estos, para cada caso y sin mandamiento judicial, con excepción de los siguientes:
a) Respecto de salarios pueden hacerse deducciones, retenciones o compensaciones en los casos autorizados por los artículos 113, 150, 151, 152 y 400 del Código Sustantivo de Trabajo.
b) Las cooperativas pueden ordenar retenciones hasta del cincuenta por ciento (50%) de salarios y prestaciones, para cubrir sus créditos, en la forma y en los casos en que la ley los autorice.
c) El Banco Popular, de acuerdo con lo dispuesto por la Ley 24 de 1952, puede igualmente ordenar retenciones hasta de un cincuenta por ciento (50%) de salario y prestaciones, para cubrir sus créditos en la forma y en los casos en que la ley lo autoriza, y
d) En cuanto a la cesantía y las pensiones de jubilación, la empresa puede retener el valor respectivo en los casos del artículo 250 del Código Sustantivo de Trabajo.

2. Obligar en cualquier forma a los trabajadores a comprar mercancías o víveres en almacenes que establezca la empresa.

3. Exigir o aceptar dinero del trabajador como gratificación para que se admita en el trabajo o por motivo cualquiera que se refiera a las condiciones de este.

4. Limitar o presionar en cualquier forma a los trabajadores el ejercicio de su derecho de asociación.
5. Imponer a los trabajadores obligaciones de carácter religioso o político o dificultarles o impedirles el ejercicio del derecho al sufragio.
6. Hacer o autorizar propaganda política en los sitios de trabajo.
7. Hacer o permitir todo género de rifas, colectas o suscripciones en los mismos sitios.
8. Emplear en las certificaciones de que trata el ordinal 7º del artículo 57 del Código Sustantivo del Trabajo signos convencionales que tiendan a perjudicar a los interesados o adoptar el sistema de “lista negra”, cualquiera que sea la modalidad que se utilice para que no se ocupe en otras empresas a los trabajadores que se separen o sean separados del servicio.
9. Cerrar intempestivamente la empresa. Si lo hiciera además de incurrir en sanciones legales deberá pagar a los trabajadores los salarios, prestaciones, o indemnizaciones por el lapso que dure cerrada la empresa. Así mismo cuando se compruebe que el empleador en forma ilegal ha retenido o disminuido colectivamente los salarios a los trabajadores, la cesación de actividades de estos, será imputable a aquél y les dará derecho a reclamar los salarios correspondientes al tiempo de suspensión de labores.
10. Despedir sin justa causa comprobada a los trabajadores que les hubieren presentado pliego de peticiones desde la fecha de presentación del pliego y durante los términos legales de las etapas establecidas para el arreglo del conflicto.
11. Ejecutar o autorizar cualquier acto que vulnere o restrinja los derechos de los trabajadores o que ofenda su dignidad (CST, art. 59).

ART. 45.—Se prohíbe a los trabajadores:


Presentarse al trabajo en estado de embriaguez o bajo la influencia de narcóticos o drogas enervantes o alucinógenas, o bajo las secuelas propias de su consumo.
Conservar armas de cualquier clase en el sitio de trabajo, a excepción de las que con autorización legal pueden llevar los celadores.
Faltar al trabajo sin justa causa de impedimento o sin permiso de la Empresa.
Disminuir intencionalmente el ritmo normal de ejecución de trabajo; suspender labores, promover suspensiones intempestivas del trabajo o incitar a su declaración o mantenimiento, sea que se participe o no en ellas.
Coartar la libertad para trabajar o para afiliarse o no a un sindicato o permanecer en él o retirarse.
Usar los útiles o herramientas suministradas por la Empresa en objetos distintos del trabajo contratado.
Ejecutar cualquier acto que ponga en peligro la seguridad de sus compañeros de trabajo, la de sus superiores o la de terceras personas, o que amenacen y perjudiquen las máquinas, elementos, edificaciones, talleres y salas de trabajo.
Suministrar a extraños, sin autorización expresa de las Directivas de la Empresa, datos relacionados con la organización o con cualquiera de los sistemas, servicios o procedimientos de la Empresa.
Prestar servicios a cualquier otra empresa, o mantener con ella intereses comerciales, financieros, técnicos o semejantes.
Elaborar o ayudar a elaborar productos o servicios iguales, similares o conexos a los de la Empresa, ya sea para terceros o para provecho del mismo trabajador.
Aprovecharse con beneficio, propio o ajeno, de los estudios, descubrimientos, inventos, informaciones o mejorar hechas por el trabajador, o con intervención de él, durante la vigencia del contrato de trabajo, y que tenga relación con las labores y funciones que aquel desempeña.
Ocuparse en asuntos distintos de su labor durante las horas de trabajo sin previo permiso del superior respectivo.
Intervenir en cualquier forma en la promoción, organización o realización de huelgas, paros, ceses o suspensiones del trabajo en la Empresa, cuando tales hechos tengan el carácter de ilegales, intempestivos o de alguna manera sean contrarios a las disposiciones de la ley y el reglamento.
Ejecutar defectuosamente el trabajo.
Causar cualquier daño en la labora confiada o en las instalaciones, equipos, productos y elementos de la Empresa.
Confiar a otro trabajador, sin la autorización correspondiente, la ejecución del propio trabajo, o el manejo de vehículos, instrumentos, elementos y materiales de la Empresa asignados al trabajador.
Vender, cambiar, prestar o negociar en cualquier forma algún objeto de propiedad de la Empresa.
Llegar con retardo al trabajo en las horas de entrada en la mañana, en la tarde o en un turno; repetir los retardos al trabajo, faltar durante la jornada, durante la mañana, durante la tarde o durante el turno, retirarse del trabajo antes de la hora indicada.
Retirarse del turno antes de que se presente el trabajador que deba sucederlo de la labor.
Dejar de marcar la propia tarjeta de control, timbrar la de otro trabajador o sustituir a éste en cualquier forma irregular.
Emplear para cualquier efecto, la tarjeta de otro trabajador, o el carnet de éste.
Levantarse del puesto de trabajo o dar por terminada la labor antes de la señal fijada para ellos por la Empresa.
Pasar al puesto o lugar de trabajo de otro trabajador sin orden del jefe respectivo o sin previo permiso o motivo justificado.
Aún en el caso de orden, permiso o motivo justificado, gastar más tiempo del normal necesario, dentro o fuera de la Empresa, salvo la justificación para cada caso.
Recibir visitas de carácter personal en el trabajo o dentro de la Empresa, o permitir que extraños ingresen a ella para asuntos no relacionados estrictamente con el trabajo.
Verificar reuniones en locales o predios de la Empresa, sin previo permiso de la misma, aún cuando sea en horas diferentes a las de trabajo.
Dormir en los sitios de trabajo.
Mantener dentro de la Empresa y en cualquier cantidad, licores embriagantes o tóxicos, explosivos, barbitúricos, estupefacientes, drogas enervantes y cualquier sustancia o producto semejante.
Ingerir dentro de la Empresa y aún cuando sea en horas diferentes a las de trabajo, licores o cualquiera de las sustancias y productos mencionados en el numeral anterior.
Fumar en lugares donde esté prohibido o en donde hacerlo conlleve un riesgo para las personas o bienes de la Empresa
Iniciar, auspiciar o tomar parte en juegos prohibidos en los lugares de trabajo o cualquier lugar oficial de la Empresa, sea o no en horas o días de trabajo.
Jugar de manos o jugar dinero en cualquiera forma dentro del establecimiento, sea o no en horas o días de trabajo.
Comer dentro de las horas de trabajo, salvo en las horas y forma autorizadas en el presente Reglamento.
No usar en la forma indicada la ropa de trabajo o los uniformes especiales según el caos.
Haber presentado para la admisión en la Empresa, o presentar después para cualquier efecto, cualquier documento o información falsos, dolosos, incompletos, enmendados o no ceñidos a la estricta verdad.
Presentar o proponer, para liquidaciones de cesantías, promesas de compra –venta u otros documentos semejantes, ficticios, falsos o dolosos.
Pedir en préstamo dinero a subalternos de trabajo.
Destruir, dañar, retirar de los archivos o dar a conocer cualquier documento de la Empresa, sin autorización expresa de esta misma.
Amenazar o agredir en cualquier forma a superiores o a compañeros de trabajo, injuriarlos, calumniarlos o difamarlos, calificarlos con apodos, palabras groseras o actos semejantes, en forma verbal o escrita y redactar, imprimir, costear, publicar o distribuir escritos que contengan esta clase de amenazas o agresiones, injurias,. Calumnias o difamaciones.
Originar o promover riñas, discordias o discusiones con otros trabajadores, o tomar parte en tales actos.
Distribuir periódicos, hojas volantes, circulares o documentos semejantes no ordenados o autorizados por la Empresa, en horas de trabajo.
Fijar papeles y carteles o escribir en los muros internos o externos de la Empresa, sin la debida autorización.
Transportar en los vehículos de la Empresa, sin previa autorización del jefe respectivo personas u objetos ajenos a ella.
Manejar vehículos de la Empresa sin licencia o con la licencia u otros documentos vencidos.
Dejar que los vehículos de la Empresa sean movidos o conducidos por personas diferentes al respectivo conductor.
Sacar de la Empresa o de los sitios indicados por ella, vehículos de propiedad de ésta, sin la autorización correspondiente-
Introducir paquetes u objetos similares, a instalaciones o lugares de la Empresa donde por razones especiales esto esté prohibido, o negarse a revelar su contenido cuando esté previsto tal requisito.
Al salir de cualquier dependencia o sección de la Empresa, todo trabajador o empleado, deberá mostrar o exhibir todo bulto o paquete sospechosos que llevare en las manos, o en otras partes de su cuerpo, si es requerido para ellos por los vigilantes., a fin de desvirtuar sospecha en su contra.

Utilizar dentro del trabajo sin autorización expresa de la Empresa, los radiorreceptores de ésta u otros para escuchar música, radionovelas, noticias u otros programas.
Leer durante las horas de trabajo, asuntos distintos a este mismos y no exigidos por la labor que se ejecuta.
Conversar y discutir en horas de trabajo asuntos ajenos a este mismo.
Discutir asuntos políticos o religiosos dentro de la Empresa, aún cuando sean en horas distintas a las de trabajo.
Hacer cualquier venta, suscripción o actos comerciales semejantes dentro de la Empresa.
Los demás que resulten de la naturaleza misma del trabajo confiado, del contrato, de las disposiciones legales, de este mismo reglamento y de los diversos estatutos y normas de la Empresa.
Sustraer de la mina, taller o establecimiento, los útiles de trabajo, herramientas, equipos, materiales, insumos, las materias primas o productos elaborados, o cualquier otro bien de propiedad de la empresa, sin permiso de la Empresa.




CAPÍTULO XIII

Escala de faltas y sanciones disciplinarias

ART. 46.—La empresa no puede imponer a sus trabajadores sanciones no previstas en este reglamento, en pactos, convenciones colectivas, fallos arbitrales o en el contrato de trabajo (CST, art. 114).

ART. 47—Se establecen las siguientes clases de faltas leves, y sus sanciones disciplinarias, así:
RETARDOS:
El retardo de quince (15) minutos en la hora de entrada al trabajo, sin la excusa suficiente, cuando no cause perjuicio de consideración a la Empresa, implica por primera vez, llamado de atención verbal; y por segunda vez una amonestación por escrito con copia a la hoja de vida, por tercera vez, la sanción consistirá en la suspensión en el trabajo en la mañana o en la tarde o en turno en que ocurra, por cuarta vez, la sanción consistirá en suspensión en el trabajo por un día, y por quinta vez, la sanción consistirá en suspensión en el trabajo hasta por quince (15) días.
AUSENCIAS:
La falta al trabajo en la mañana, o en la tarde, o en el turno correspondiente, sin excusa suficiente, cuando no cause perjuicio de consideración a la Empresa, implica, por la primera vez una suspensión en el trabajo por un (1) día, por la segunda vez, suspensión en el trabajo hasta por tres (3) días y por la tercera vez, suspensión en el trabajo hasta por veinte (20) días.
La falta total al trabajo, durante un día sin excusa suficiente, cuando no cause perjuicio de consideración a la Empresa, implica por la primera vez, una suspensión en el trabajo hasta por ocho (8) días, y por la segunda vez, suspensión en el trabajo hasta por treinta (30) días.
PARAGRAFO: Si se tiene evidencia de cualquier clase, que la falta al trabajo, bien sea a un turno, o todo el día, fue motivado por consumo de alcohol o drogas, la sanción se podrá elevar al doble de lo estipulado en cada caso, siempre y cuando ocurra por primera vez.
PARAGRAFO: La violación leve por parte del trabajador de las obligaciones o prohibiciones contenidas en el presente reglamento, contractuales o reglamentarias, implica por primera vez, suspensión en el trabajo hasta por ocho (8) días, y por segunda vez, suspensión en el trabajo hasta por dos (2) meses.

ART. 48. — Faltas graves:
Constituyen faltas graves: y por lo tanto, en el evento de presentarse se podrá dar por terminado el contrato de trabajo, de manera unilateral, con justa causa y sin previo aviso, de conformidad con lo dispuesto en el numeral 6 del literal a del artículo 62 del Código Sustantivo del Trabajo, los siguientes eventos:
El retardo hasta de cinco (5) minutos en la hora de entrada al trabajo sin excusa suficiente, por quinta vez, durante el respectivo contrato.
El salir de las instalaciones de la compañía sin permiso o cumplimiento de las normas internas, sin causa justificada o mediante engaño, durante la jornada laboral, sin importar el tiempo, por cuarta vez.
La falta total del trabajador a sus labores en la mañana, en la tarde o en el turno correspondiente, sin excusa suficiente. Por tercera vez durante el respectivo contrato.
La falta total del trabajador a sus labores durante dos días consecutivos, sin excusa suficiente y/o oportuna, así ocurra por primera vez.
La violación leve por parte del trabajador de las obligaciones o prohibiciones contenidas dentro del presente reglamento, las contractuales o reglamentarias, así ocurra por primera vez.
El haber sufrido engaño por parte del trabajador, mediante la presentación de certificados falsos para su admisión o tendientes a obtener un provecho indebido.
Todo acto de violencia, injuria, malos tratamientos o grave indisciplina en que incurra el trabajador en sus labores, contra el patrono, los miembros de su familia, el personal directivo o los compañeros de trabajo.
Todo acto grave de violencia, injuria o malos tratamientos en que incurra el trabajador fuera del servicio en contra del patrono, de los miembros de su familia o de sus representantes y socios, jefes de taller, vigilantes o celadores.
Todo daño material causado intencionalmente a los edificios, obras, maquinarias y materias primas, instrumentos y demás objetos relacionados con el trabajo, y en toda grave negligencia que ponga en peligro la seguridad de las personas o las cosas.
Todo acto inmoral, delictuoso que el trabajador cometa en la mina, establecimiento o lugar de trabajo, o en el desempeño de sus labores.
Cualquier violación grave de las obligaciones o prohibiciones especiales que incumben al trabajador de acuerdo con los artículos 58 y 60 del Código Sustantivo del Trabajo, o cualquier falta grave calificada en pactos o convenciones colectivas, fallos arbítrales, contratos individuales o reglamentos.
La detención preventiva del trabajador por más de treinta (30) días a menos que posteriormente sea absuelto, o el arresto correccional que exceda de ocho (8) días, o aún por un tiempo menor, cuando la causa de la sanción sea suficiente por si misma para justificar la extinción del contrato.
El que el trabajador revele los secreto técnicos o comerciales o de a conocer asuntos de carácter reservado, con perjuicio de la Empresa.
El deficiente rendimiento en el trabajo, en relación con la capacidad del trabajador y con el rendimiento promedio en las labores análogas, cuando no se corrija con un plazo razonable a pesar del requerimiento del patrono.
Todo vicio del trabajador que perturbe la disciplina del establecimiento.
La renuencia sistemática del trabajador a aceptar las medidas preventivas, profilácticas o curativas, prescritas por el médico del patrono o por las autoridades para evitar enfermedades o accidente.
La ineptitud del trabajador para realizar la labor encomendada.
La enfermedad contagiosa o crónica del trabajador, que no tenga carácter de profesional, así como cualquier otra enfermedad o lesión que lo incapacite para el trabajo, cuya curación no haya sido posible durante ciento ochenta (180) días. El despido por esta causa no podrá efectuarse sino al vencimiento de dicho lapso y no exime al patrono de las prestaciones e indemnizaciones legales y convencionales derivadas de la enfermedad.
En los casos de los numerales 9 a 15 de este artículo, para la terminación del contrato, el patrono deberá dar aviso al trabajador con anticipación no menor de quince (15) días.
Todo daño o lesión que el trabajador cometa en su propia persona, de manera voluntaria.
El retardo o inejecución de las funciones o labores encomendadas al trabajador.
Provocar riñas en cualquier forma dentro de las dependencias de la Empresa
Toda perturbación llevada a cabo en los cortes, propiedades y minas de la empresa por el trabajador.
Discutir temas políticos, religiosos o sociales en horas de trabajo.
Verificar reuniones políticas o de carácter religioso dentro de las dependencias de la Compañía, así como también asambleas o reuniones sindicales.
Cualquier violación grave por parte del trabajador de las obligaciones contractuales, de las del presente Reglamento.
Presentarse embriagado o alicorado al trabajo, o ingerir licores, narcóticos o drogas enervantes durante las horas de servicio, o portar armas durante el trabajo, salvo quienes durante el mismo deben tenerlas.
Cualquier acto de grave negligencia, descuido u omisión en que incurra el trabajador en el ejercicio de las funciones propias de su cargo.
Cualquier falta u omisión en el manejo de los dineros, elaboración de nóminas, liquidación de contratos, efectos de comercio, valores y elementos de producción y herramientas que el trabajador reciba, tenga en su poder o maneje en su labor; o que el trabajador disponga de ellas en su propio beneficio o en el de terceros, o que no rinda cuenta del manejo de tales dineros, valores o efectos de comercio, de acuerdo con los sistemas y procedimientos establecidos por el patrono o en la oportunidad en que debe hacerlo.
Cualquier acto de violencia, injuria o el mal trato de palabra o de obra o faltas de respeto en que incurra el trabajador dentro de las dependencias del patrono, contra los clientes o proveedores de la Empresa o contra terceros que se encuentren en tales dependencias
Cualquier daño o pérdida que por culpa, negligencia o descuido, o por el desobedecimiento de órdenes, cause el trabajador a los elementos, maquinarias, equipos o materiales puesto bajo su cuidado para el ejercicio del cargo.

Comentar aún en forma indirecta, asuntos confidenciales puestos bajo su responsabilidad o conocidos en virtud de su trabajo.
Aceptar o solicitar créditos o dádivas a los clientes o proveedores de la Empresa a cambio de favores o tratamientos especiales en los asuntos que dichas personas tramiten ante la Empresa.
Cobrar subsidio familiar o pedir auxilios legales o convencionales, por hijos u otros familiares por los cuales no se tiene legalmente derecho, bien sea porque son supuestos, han fallecido, no dependen económicamente del trabajador o porque sobrepasan la edad máxima prevista en las disposiciones que rigen estos subsidios y auxilios.
Consignar en la solicitud de empleo que se presenta cuando se va a ingresar a la empresa, datos falsos u ocultar información solicitada en el mismo documento, que no contravenga lo estipulado en la Ley
Certificar a la Empresa, para su cobro, relaciones, cuentas o planillas de trabajo suplementario en horas extras, dominicales o festivos legales, o recargos por trabajo nocturno que no correspondan a la realidad.
El que el trabajador, si ha sido sancionado disciplinariamente por dos faltas incurra en una tercera falta dentro del término de dos (2) años calendario.
PARAGRAFO: El patrono al terminar unilateralmente y por justa causa el contrato de trabajo debe manifestar al trabajador, en el momento de la extinción, la causal o motivo de esta determinación. Posteriormente no pueden alegarse válidamente causales o motivos distintos.


ART. 49.—Antes de aplicarse una sanción disciplinaria, el empleador deberá oír al trabajador inculpado directamente y si este es sindicalizado deberá estar asistido por dos representantes de la organización sindical a que pertenezca. En todo caso se dejará constancia escrita de los hechos y de la decisión de la empresa de imponer o no, la sanción definitiva (CST, art. 115).

ART. 50.—No producirá efecto alguno la sanción disciplinaria impuesta con violación del trámite señalado en el anterior artículo (CST, art. 115).

CAPÍTULO XIV

Reclamos: personas ante quienes deben presentarse y su tramitación

ART. 51.—Los reclamos de los trabajadores se harán ante la persona que ocupe en la empresa el cargo de: administrador o en su defecto el director de personal quien los oirá y resolverá en justicia y equidad (diferente del que aplica las sanciones).

ART. 52.—Se deja claramente establecido que para efectos de los reclamos a que se refieren los artículos anteriores, el trabajador o trabajadores pueden asesorarse del sindicato respectivo.
PAR.—En la empresa SEGOVIA MINERA GOLD S.A.S no existen prestaciones adicionales a las legalmente obligatorias.

CAPÍTULO XV
Publicaciones

ART. 53.—Dentro de los quince (15) días siguientes al de la notificación de la resolución aprobatoria del presente reglamento, el empleador debe publicarlo en el lugar de trabajo, mediante la fijación de dos (2) copias de caracteres legibles, en dos (2) sitios distintos. Si hubiere varios lugares de trabajo separados, la fijación debe hacerse en cada uno de ellos. Con el reglamento debe fijarse la resolución aprobatoria (CST, art. 120).

CAPÍTULO XVI

Vigencia

ART. 54.—El presente reglamento entrará a regir 8 días después de su publicación hecha en la forma prescrita en el artículo anterior de este reglamento (CST, art. 121).


CAPÍTULO XVII

Disposiciones finales

ART. 55.—Desde la fecha que entra en vigencia este reglamento, quedan sin efecto las disposiciones del reglamento que antes de esta fecha haya tenido la empresa.

CAPÍTULO XVIII

Cláusulas ineficaces

ART. 56.—No producirán ningún efecto las cláusulas del reglamento que desmejoren las condiciones del trabajador en relación con lo establecido en las leyes, contratos individuales, pactos, convenciones colectivas o fallos arbitrales los cuales sustituyen las disposiciones del reglamento en cuanto fueren más favorables al trabajador (CST, art. 109).


CAPÍTULO XIX

Mecanismos de prevención del abuso laboral y procedimiento interno de solución

ART. 57.—Los mecanismos de prevención de las conductas de acoso laboral previstos por la empresa constituyen actividades tendientes a generar una conciencia colectiva convivente, que promueva el trabajo en condiciones dignas y justas, la armonía entre quienes comparten vida laboral empresarial y el buen ambiente en la empresa y proteja la intimidad, la honra, la salud mental y la libertad de las personas en el trabajo.

ART. 58.—En desarrollo del propósito a que se refiere el artículo anterior, la empresa ha previsto los siguientes mecanismos:
1. Información a los trabajadores sobre la Ley 1010 de 2006, que incluya campañas de divulgación preventiva, conversatorios y capacitaciones sobre el contenido de dicha ley, particularmente en relación con las conductas que constituyen acoso laboral, las que no, las circunstancias agravantes, las conductas atenuantes y el tratamiento sancionatorio.
2. Espacios para el diálogo, círculos de participación o grupos de similar naturaleza para la evaluación periódica de vida laboral, con el fin de promover coherencia operativa y armonía funcional que faciliten y fomenten el buen trato al interior de la empresa.
3. Diseño y aplicación de actividades con la participación de los trabajadores, a fin de:
a) Establecer, mediante la construcción conjunta, valores y hábitos que promuevan vida laboral convivente;
b) Formular las recomendaciones constructivas a que hubiere lugar en relación con situaciones empresariales que pudieren afectar el cumplimiento de tales valores y hábitos y
c) Examinar conductas específicas que pudieren configurar acoso laboral u otros hostigamientos en la empresa, que afecten la dignidad de las personas, señalando las recomendaciones correspondientes.
4. Las demás actividades que en cualquier tiempo estableciere la empresa para desarrollar el propósito previsto en el artículo anterior.
ART. 59.—Para los efectos relacionados con la búsqueda de solución de las conductas de acoso laboral, se establece el siguiente procedimiento interno con el cual se pretende desarrollar las características de confidencialidad, efectividad y naturaleza conciliatoria señaladas por la ley para este procedimiento (a título de ejemplo):
1. La empresa tendrá un comité (u órgano de similar tenor), integrado en forma bipartita, por un representante de los trabajadores y un representante del empleador o su delegado. Este comité se denominará "comité de convivencia laboral".

2. El comité de convivencia laboral realizará las siguientes actividades:
a) Evaluar en cualquier tiempo la vida laboral de la empresa en relación con el buen ambiente y la armonía en las relaciones de trabajo, formulando a las áreas responsables o involucradas, las sugerencias y consideraciones que estimare necesarias.
b) Promover el desarrollo efectivo de los mecanismos de prevención a que se refieren los artículos anteriores.
c) Examinar de manera confidencial, cuando a ello hubiere lugar, los casos específicos o puntuales en los que se planteen situaciones que pudieren tipificar conductas o circunstancias de acoso laboral.
d) Formular las recomendaciones que se estimaren pertinentes para reconstruir, renovar y mantener vida laboral convivente en las situaciones presentadas, manteniendo el principio de la confidencialidad en los casos que así lo ameritaren.
e) Hacer las sugerencias que considerare necesarias para la realización y desarrollo de los mecanismos de prevención, con énfasis en aquellas actividades que promuevan de manera más efectiva la eliminación de situaciones de acoso laboral, especialmente aquellas que tuvieren mayor ocurrencia al interior de la vida laboral de la empresa.
f) Atender las conminaciones preventivas que formularen los inspectores de trabajo en desarrollo de lo previsto en el numeral 2º del artículo 9º de la Ley 1010 de 2006 y disponer las medidas que se estimaren pertinentes.
g) Las demás actividades inherentes o conexas con las funciones anteriores.
3. Este comité se reunirá por lo menos cada dos meses, designará de su seno un coordinador ante quien podrán presentarse las solicitudes de evaluación de situaciones eventualmente configurantes de acoso laboral con destino al análisis que debe hacer el comité, así como las sugerencias que a través del comité realizaren los miembros de la comunidad empresarial para el mejoramiento de la vida laboral.
4. Recibidas las solicitudes para evaluar posibles situaciones de acoso laboral, el comité en la sesión respectiva las examinará, escuchando, si a ello hubiere lugar, a las personas involucradas; construirá con tales personas la recuperación de tejido convivente, si fuere necesario; formulará las recomendaciones que estime indispensables y, en casos especiales, promoverá entre los involucrados compromisos de convivencia.
5. Si como resultado de la actuación del comité, este considerare prudente adoptar medidas disciplinarias, dará traslado de las recomendaciones y sugerencias a los funcionarios o trabajadores competentes de la empresa, para que adelanten los procedimientos que correspondan de acuerdo con lo establecido para estos casos en la ley y en el presente reglamento.
6. En todo caso, el procedimiento preventivo interno consagrado en este artículo, no impide o afecta el derecho de quien se considere víctima de acoso laboral para adelantar las acciones administrativas y judiciales establecidas para el efecto en la Ley 1010 de 2006.



Fecha: 28 de enero de 2.010
Dirección: Centro comercial Deifer local 108
Ciudad: Segovia
Departamento: Antioquia
Representante legal: FERNANDO GOMEZ MOLINA




NUESTRA MISIÓN Y VISIÓN

VISIÓN “FUTURO A FUTURO”
Ser la mejor Empresa Minera Segoviana, comprometida con el cumplimiento de los estándares competitivos, operando con eficiencia, respeto al medio ambiente, responsabilidad social y compromiso con la sociedad proyectando la pequeña minería al futuro.

MISIÓN
Realizar nuestro trabajo con empeño, responsabilidad y lealtad estableciendo estándares con nuestro propio ejemplo, llevando siempre presente el deseo de brindar calidad de vida a los mineros resaltando los valores morales y culturales de la región.

NUESTROS VALORES

Integridad
Para que nuestras acciones se desarrollen con entereza moral y probidad.
Respeto
Para afianzar nuestra relación con los grupos de interés y velar por la preservación del medio ambiente.
Lealtad
Para afirmar nuestra compromiso con la empresa y sus integrantes.
Transparencia
Para informar de manera objetiva y oportuna, acerca de nuestras actividades.
Solidaridad
Para coadyuvar al desarrollo sostenible del entorno.

viernes, 5 de marzo de 2010

HISTORIA DEL ORO EN SEGOVIA Y REMEDIOS

DISCURSO CELEBRACIÓN 150 AÑOS
FRONTINO GOLD MINES LTD.REALIZADO POR DOCTOR WILFREDO LOPEZ EL 20 DE ABRIL de 2002


Es para la gran familia empresarial de la Frontino Gold Mines, un motivo de gran satisfacción y orgullo poder compartir con nuestros ilustres invitados, amigos, y la comunidad en general de los municipios de Segovia y Remedios el sesquicentenario de fundación de esta maravillosa compañía.

Decir en pleno siglo XXI que laboramos para una empresa que ha estado presente durante tres siglos en la historia de una región y de un país, no lo pueden contar muchas personas en todo el mundo. Este es un privilegio que solo le toca a unos cuantos, y nosotros los trabajadores, empleados, directivos y jubilados pertenecemos a ese grupo elite.

La historia de la Frontino Gold Mines es una historia matizada por una condiciones excepcionales. Bien podía usarse el termino “realismo mágico” para definir todo lo que se ha vivido alrededor de nuestra empresa; partiendo del elemento fundamental, el oro, cuyas condiciones fisicoquímicas lo hacen inigualable. La ruina o el esplendor de la humanidad, deben haber iniciado su historia el mismo día en que alguien descubrió la primer pepita de oro. Objeto de aventura, vital en la economía, materia de fantasía, de la religión y de la ciencia; el oro es sin embargo un metal entre muchos otros. El oro es tan maravilloso, aparte de su belleza y atractivo físico, que de un gramo de oro se puede estirar un hilo de 3,500 metros, o se puede reducir a una lamina 1/10,000 de milímetro casi transparente. Su inalterabilidad frente a la acción del agua y del aire, a cualquier temperatura, su excelente capacidad para conducir la electricidad, así como su capacidad para ser expuesto a las unidades mas inconmensurables de tiempo, hicieron del oro un elemento a salvo del deterioro, eternamente brillante y luminoso, imperecedero a través de milenios. Ese elemento mágico mezclado con las selvas vírgenes del Nordeste antioqueño, rodeado de tigres, monos, culebras, pájaros, mal de ojo y animales de todas las especies, humedecidos por la intensas lluvias tropicales, fue explotado por una amalgama de hombres provenientes de todos los continentes generando una raza única de la cual somos sus actuales descendientes. Este ambiente mágico, lleno de embrujo ha cautivado a mas de uno de los que estamos aquí presentes y por eso se dice que el que llegue a Segovia o Remedios aquí se queda, y de eso damos fé varios de los aquí presentes.

La historia de la Frontino Gold Mines es rica, amplia y se encuentra enmarcada en acontecimientos importantes que han hecho historia en la humanidad. Profundizar en esos hechos nos llevan a trasladarnos en el tiempo a la época de la conquista española. Apenas comenzaba la conquista, la corona española advirtió la enorme riqueza en oro que encerraba la América Hispana. Por eso, en 1504 el monarca Fernando de Aragón expidió en Medina del Campo su primera real cédula sobre la materia, en la cual abrió la búsqueda de oro a todos sus súbditos, con una política económica francamente aperturista, disponiendo que “todas las minas fuesen comunes, y a todos se les permitiese buscarlas, catearlas, y laborarlas donde quiera que se pudiesen hallar con tal de que pagasen al rey un tributo por los metales que sacasen y beneficiasen”, Así se constituyó “el quinto real en oro”, como recurso fiscal de la corona y se estimuló a los conquistadores a venir a tierra firme. De esta manera nació el concepto de las regalías,

Es así como se puede evidenciar que en el nuevo mundo la colonización española se basó principalmente en la minería del oro y la plata. Las zonas que contenían ricos depósitos de oro y plata se convirtieron habitualmente en centros de cultura española. Las áreas mineras influyeron con fuerza sobre las principales actividades económicas; la gente de las comunidades mineras tenia que ser alimentada, vestida, provista de herramientas, reactivos y mano de obra. Es fácil entonces concluir que tanto la agricultura como la ganadería y la fundación de pueblos se debieron a la minería del oro. La fundación del municipio de Remedios, según el investigador Robert West, se originó alrededor de la minería. Dice Mr. West en su libro “La Minería de aluvión en Colombia durante el periodo colonial”: “Hacia el norte se estableció el real de minas de Victoria, sobre el río la miel (tributario del saman del sur). Esta fundación la hicieron en 1559 mineros de Mariquita, pero treinta años mas tarde la población ha sido abandonada. En 1560 los mineros de Victoria continuaron su marcha al norte, entrando a las laderas de selvas densas de la cordillera Central y fundaron el campamento llamado Nuestra Señora de los Remedios, probablemente en el valle de San Carlos. Como ocurría con tanta frecuencia en los campamentos basados en la minería de placer, el sitio de Remedios fue trasladado muchas veces. En 1562 fue movido hacia el norte a Buenavista, de localización incierta, y el año siguiente al Valle de San Blas, ubicado en algún lugar del Alto Nus. A causa de una devastadora epidemia de viruela, el campamento fue nuevamente trasladado en 1589 a unos cuantos kilómetros al norte del valle de San Bartolomé, pero todavía se extraía oro de los placeres del Nus. Finalmente Remedios fue transferida en 1594 a su sitio actual en el margen noroeste del batolito Antioqueño, cerca de grandes depósitos de veta y aluvión, cuyo descubrimiento desencadenó una de las mayores fiebres de oro que ocurrieron en la nueva Granada. Españoles con cuadrillas de esclavos se lanzaron a Remedios desde Cartagena, Antioquia y Mariquita. Antes de dos años ya se habían importado 2,000 esclavos para extraer minerales metálicos de estrechos pozos y para lavar oro de los arroyos cercanos como el Oca y el Pocuné. Durante los primeros años las minas produjeron cerca de 150,000 pesos en oro por año. A finales del siglo XVI, el laboreo de minas era ya la actividad económica mas importante para los pocos pobladores antioqueños (que eran unos 8,000 blancos y unos 15,000 indígenas, según el oidor don Francisco de Herrera y Campuzano). En vista de ello, el gobernador don Gaspar de Rodas promulgó las primeras “Ordenanzas de Minas” en 1584, las cuales serán la raíz del derecho minero antioqueño; y que con el tiempo sería la base del derecho minero colombiano. Las ordenanzas de Rodas sentaron entre muchas otras, tres disposiciones fundamentales que aun hoy en día persisten: a) El principio según el cual los derechos y las riquezas del subsuelo pertenecen al soberano; b) La limitación superficiaria del área que el soberano podía entregar en concesión a cada persona; c) La preeminencia de los derechos del concesionario minero, por encima del propietario de la tierra o del titular de una concesión agrícola.

El progreso de la minería durante el siglo XVII en Antioquia fue lento. Contra el conspiraban el escaso numero de nuevos pobladores, el agotamiento de las numerosas minas de placeres y las pocas de veta que existían se profundizaron y tuvieron problemas de desagüe, los problemas de salubridad también influyeron demasiado en especial las enfermedades europeas, la viruela y el tifo que exterminaba pueblos enteros. La población indígena disminuyó velozmente en los primeros años de este siglo y pronto faltaron brazos para el trabajo de las minas. Por esa razón se trajeron los esclavos negros desde Cartagena; pero la gran distancia a ese puerto y la dificultad de su transporte a pie, los hacía siempre escasos y muy caros en la provincia. Dice Don Vicente Restrepo en su libro “Estudio sobre las minas de oro y plata de Colombia” que “en Zaragoza era tan común ver morir prontamente a los españoles que venían en busca de fortuna, que cuando llegaba un Chapetón, iban otros a preguntar al cura cuanto pedían por el vestido del pobre aventurero, pues este no tenía otra prenda con que pagar su entierro”.

Durante la mayor parte del siglo XVIII, la minería estuvo en franca decadencia. Uno de los fenómenos claves fue la declinación de la minería en cuadrillas, varios factores contribuyeron a ello: - la elevada mortalidad de los negros en las insalubres tierras de aluvión; - el alto costo para mantenerlos permanentemente alimentados; - la escasez de mano de obra esclava; - la rudimentaria tecnología. Todo ello aceleró el deterioro de la minería esclavista, la cual venía produciendo hacia tiempo solamente un tercio del oro de la provincia; y cuya importancia disminuyó aun mas al finalizar el siglo, creando condiciones que habrían de favorecer poco después el movimiento para la liberación de esclavos.

Los inicios del siglo XIX mostraron una caída de la economía antioqueña debido a las guerras de independencia, donde Antioquia aportó jóvenes para pelear al lado de Girardot, Caldas y Córdoba, motivos por los cuales se redujo la producción de oro. Antioquia aportó soldados, y el mayor aporte económico de todas las provincias, siendo el oro el principal aportante. Elocuentemente decía Santander en una de sus cartas a Bolívar en Lima: “Esta provincia (Antioquia) no quisiera que diera ya un hombre. Mas de dos mil le hemos sacado, entre ellos mil negros..., es la Provincia desde donde todavía no he recibido un solo reclamo por los empréstitos, reclutas y ordenes fuertes, y le llevamos sacado cerca de cuatrocientos mil pesos en barras de oro..”. Esto significa algo así como casi una tonelada métrica de oro. De esta magnitud fue el apoyo humano y financiero que aportó Antioquia a la liberación de la Gran Colombia del Perú y de Bolivia. El oro de Remedios como de otras comarcas pagó armamentos, uniformes y soldados para esta gran contienda, en una proporción muy significativa.

Este enorme gran sacrificio del pueblo Antioqueño trajo grandes beneficios durante los inicios de la primera República. El mas grande beneficio fue la desaparición casi total del control gubernamental español en el periodo 1810 a 1820. Con la perdida del control español desapareció el quinto real. Esto permitió a los comerciantes de oro aumentar enormemente sus ganancias, así nacieron los grandes capitales Antioqueños, así se forjó la gran industria de Antioquia. Su gran capacidad de pago y la libertad para importar mercancías de fuera de España, dieron a los antioqueños comerciantes un gran poder, que ellos acrecentaron y afianzaron comprando armas para los ejércitos patriotas, sin duda con jugosas comisiones y primas como intermediarios obligados. Esa posición ventajosa les fue confirmada por los gobernantes patriotas que veían en ellos los únicos posibles financiadores en las precarias condiciones políticas internas y económicas en que nació la nueva República.

A partir de 1820, al término de la guerra en la nueva Granada, al reabrirse los puertos y reanudarse las exportaciones de oro, se despertó un gran interés por la minería de veta entre los capitalistas de Medellín, quienes procedieron a formar las primeras sociedades de minas de la primera república. Quizás esto explique el porque ya en 1825 existían 836 minas de veta contra solo 115 de aluvión, si antes la proporción era a la inversa de 20 a 1.

Al terminar el conflicto independentista, un político muy audaz y sagaz de la época, Francisco Antonio Zea escribía en 1819 al congreso de Angostura: “Nuestras puertas se abren a todas las naciones. Que importa al estado que el propietario de una vasta plantación, de una mina de oro, sea ciudadano de Londres, de Viena, de Petersburgo? Lo que importa es el buen cultivo, el beneficio bien entendido, la explotación acertada, la multiplicación de toda clase de productos; lo que le importa es el movimiento activo de la minería y la agricultura”.

Cuando el vicepresidente Santander se enfrentó a la tarea formidable de crear una república de la nada, en el caos y en la ruina dejados por las guerras de independencia, y apremiado por Bolívar para obtener mas recursos y materiales para liberar al Perú, no tuvo mas remedio que acudir al crédito insistentemente ofrecido por Inglaterra a la joven Colombia. Fue de esta manera como se le dio a los banqueros Ingleses todas las facilidades y garantías para establecerse en el país, por encima de los intereses nacionales. Después de firmado el acuerdo en Londres en 1825 empiezan a llegar la compañías inglesas a Colombia; con ellas llegaron los primeros ingenieros de minas europeos. Aquellos ingenieros nos trajeron la mineralogía, la geología, la hidráulica, la mecánica aplicada, la teoría del calor, la química inorgánica, los métodos geofísicos, el sismógrafo, la construcción de vías, la pólvora, los reactivos químicos, la rueda hidráulica, el molino Cornish, y muchos otros aparatos y conocimientos de invaluable utilidad que dieron un nuevo y gran vigor a la minería.

Entre 1820 y 1830 Antioquia se convirtió en la principal región aurífera de la nueva Granada, superando con amplitud la provincia del Cauca y llegando a producir el 50% de todo el oro del país. Podemos entonces pensar que hubiera pasado si no hubieran existido los ricos yacimientos auríferos de Marmáto, Zaragoza y Remedios? Cual hubiera sido el futuro de nuestro país?. Es aquí donde vale la pena destacar el papel histórico de la región, de sus habitantes y de las primeras minas de oro que dieron inicio a nuestra empresa. Pocas regiones del país han jugado un papel tan importante en el nacimiento de nuestra patria como la región del alto Nordeste antioqueño.

Entre 1850 y 1855 se registra un gran movimiento de tecnificación en la minería y muy especialmente en la de veta. En aquellos años aparece y se extiende el uso de las primeras fundiciones de oro, el proceso de amalgamación con mercurio y el empleo de la maquina de vapor alimentada con leña para mover equipos pesados y en especial, algo que marco un hito en la historia de la minería Colombiana como fue la mecanización del bombeo de agua.

En 1851 compañías Inglesas particulares nombran como agente en Colombia al ex ministro de hacienda Florentino González, quien compra en 1852 algunas minas de veta en Frontino, municipio localizado al occidente de Medellín por 105,000 pesos y la mina Bolivia localizada en Remedios por 3,000 pesos y se conforma la “The Frontino and Bolivia Company para explotarlas”. De esta manera nace el 21 de Abril de 1852 la casa matriz llamada compañía “La Nueva Granada”, con un capital de 250,000 libras esterlinas y con sede en la ciudad de Londres.

La empresa inicia operaciones en el municipio de Frontino, allí no tienen mucho éxito y decide entonces hacia 1855, trasladar a lomo de mula todo el personal y equipos por la trocha de Guacharacas, para fortalecer las minas de Bolivia, pertenecientes al municipio de Remedios, en ese entonces. En 1865 se instaló la primera maquina de vapor en la mina Bolivia, para mover las bombas de agua, siendo una de las primeras en Colombia. Hacia 1868 compra los minerales de Ñememe localizados en Segovia y se inicia propiamente la explotación de la mina El Silencio, Manzanillo, Marmajito, Cogote , Cordoba, mas adelante le compra a los franceses las minas de San San Nicolas y Cristales. Se adquirió también las minas La Italia, Tres y Media, así como dos aluviones: Hilo Este y la Primera Cecilia. Los primeros administradores fueron en su orden Don José María Barreneche, Robert White y George Euslice. Se hicieron grandes inversiones para obtener agua y construir el camino Yolombó-Remedios-Zaragoza. El desarrollo minero del Nordeste Antioqueño hizo restablecer el nivel de producción de esa zona, que había estado disminuyendo desde principios del siglo. Este nuevo impulso de la minería llevó al ingeniero Cubano Francisco Javier Cisneros en 1874 a expresar en su exposición de motivos para la construcción del ferrocarril de Antioquia como una de las causas, el gran auge de la minería Antioqueña que debería tecnificarse mas usando maquinaria muy pesada y que el ferrocarril sería una gran alternativa. Es indudable el gran papel que jugó el ferrocarril de Antioquia en el impulso a la minería aurífera antioqueña pues no basta sino ver las exportaciones de oro que se duplicaron al entrar en operación dicho medio de transporte. Vale la pena mencionar que hacia la última década del siglo XIX se fundaron varias importantes poblaciones Antioqueñas fruto de la búsqueda intensa de vetas de oro entre las que se puede mencionar: San Rafael, San Carlos, Santo Domingo, Concepción, Alejandría, Santuario, Granada.

La rica historia de la región nos enseña que también estuvieron los Franceses. En 1856 se estableció la Compañía Francesa de Segovia, para explotar el oro del río Cauca con resultados económicos valiosos, generando aportes importantes para el emperador Napoleón Bonaparte. Uno de los objetivos de Napoleón III era quitarle la supremacía imperialista a los Ingleses.

La llegada de las empresas extranjeras permitió la llegada de directivos y técnicos que se mezclaron con la población existente. De esta manera llegaron los Eusse, los Blair, Los Tisnes, los Cock, los White, los Gartner, Los Camperos. No resulta curioso entonces encontrar estos apellidos entre nuestros amigos de las poblaciones vecinas, y ver hermosas mulatas de ojos verdes.

No quisiera pasar por alto el valioso aporte de la mujer al desarrollo minero de Antioquia. De las 14,942 personas que se empadronaron en el censo de 1871, habían 10,652 hombres y 4,290 mujeres. La gran mayoría de mujeres trabajaban lavando arenas, materiales de playa, mineral de segunda de las vetas así como escogedoras de peña en Maria Dama. La figura humana de la barequera se hizo entonces un símbolo de la mujer Antioqueña. Es oportuno subrayar que este elevado grado de participación femenina en los trabajos mineros creo un importantísimo precedente, en el sentido de preparar la mujer para trabajos de tesón y resistencia tanto en el sector agrícola como en el textil y magisterio y otras industrias generando un valioso aporte al desarrollo del departamento a principios del siglo XX.

El 24 de Agosto de 1865, el caserío de Tierra Adentro es erigido corregimiento de Remedios, en ese entonces era habitado por 500 personas. El 31 de Diciembre de 1877 el corregimiento adquiere el nombre de Segovia y ya para ese entonces poseía 2,500 habitantes. El 15 de Junio de 1885 se emitió el decreto por medio del cual Segovia es erigido municipio.

La empresa como un reconocimiento a la población decidió legalizar los predios y fue así como en 1888, la compañía Frontino and Bolivia le cede bajo escritura publica de una forma gratuita al distrito de Segovia una área de 83.5 hectáreas para ubicar el asentamiento.

La importancia de nuestra empresa en la economía del país se evidencia ya a finales del Siglo XIX, La compañía Frontino and Bolivia Company era una de las cinco mas importantes empresas del país, y la mas importante empresa extranjera. La principal empresa del Colombia era la mina el Zancudo que ocupaba unas 1,000 personas, Luego estaban Frontino Gold Mines que ocupaba unas 700 personas, La Fundición de Amagá, La Fundición de Pacho, la empresa textil Samacá y la Cervecería Bavaria.

El impacto de la guerra civil de 1899-1903, llamada la guerra de Los Mil Días, sobre la minería antioqueña fue devastador. Si bien en nuestro territorio no se combatió, los mineros fueron reclutados; el transporte fluvial se paralizó, las emisiones de papel moneda arruinaron a la banca local, la importación de maquinas se hizo muy difícil y hasta los empresarios se hicieron militares como lo hizo Pedro Nel Ospina.

Restaurada la paz de Colombia, bajo una administración progresista como la de Rafael Reyes y estimulada por una fuerte demanda mundial sobre el oro, la producción antioqueña y colombiana del metal aumentó velozmente durante los primeros decenios del siglo XX.

Durante las primeras décadas del siglo pasado se evidenció una decadencia del imperio inglés y surgió el Norteamericano adquiriendo la gran mayoría de sus empresas. Eso fue lo que pasó en la minería de Antioquia. Alrededor de 1910, la gran corporación norteamericana “International Mining Corporation” le compro a los ingleses todos sus derechos en la Bolivia and Frontino Gold Mining Company y simplificó su nombre a Frontino Gold Mines, emprendiendo así un proceso de modernización de sus tecnologías y de su administración.

Pocos años después, International Mining Corporation, le compró a la Orville Dredging Company su propiedad de la Pato Mining; compró además otras dos minas inglesas: La Chocó pacifico Mining y La Nariño Mining.

Cuenta Michael Hill Davey, Ingles nacido en Marmajito, en su libro “Oro y Selva – Relatos del Nordeste” que “a principios del siglo XX Remedios y Segovia aun no tenían carreteras y tanto las dos poblaciones como los campamentos mineros estaban rodeados por las espesas selvas del Nordeste antioqueño. En aquella época todos los materiales de construcción, equipos, maquinaria, víveres y mercancías, excepto algunos productos de Medellín, eran traídos del exterior por Puerto Colombia, los ríos Magdalena, Cauca y Nechí. Luego se traían por mula a través de la trocha de Zaragoza. Los productos de Medellín venían por la trocha de Guacharacas. Al lado de la mayoría de Bella Vista estaba localizada una pesebrera que albergaba 400 mulas pertenecientes a la empresa, la dirigía Don Julio Alzate”. ”. Cuenta Mr. Davey ricas y fantásticas historias de arrieros y mulas, como por ejemplo: “Cargaban y amarraban sus turegas de equipo pesado, maquinaria, cajas de víveres, etc. En el muelle de la compañía en Zaragoza que junto con una poderosa grúa para descargar las embarcaciones, luego se echaban trocha arriba golpeando y chuzando las mulas con sus recatones fueteando, gritando “¡arre!, ¡arre! ¡mula hijueputa!. ¡Arre!, ¡Arre! ¡triple malparidas hijueputas mulas!, palabras entreveradas con silbidos que eran ordenes que entendían las mulas. Hasta los pesados cables de ¾” por 1200 metros de la elevadora de la mina El Silencio y de las otras minas de apique fueron subidos por las mulas y sus arrieros por la trocha de Zaragoza. Los cables fueron desenrollados en el muelle y amarrados en trechos a los lomos de las mulas, luego esta extraña y culebreante cabalgata que media mil doscientos metros, arrancaba por la trocha demorándose en esta viaje semanas enteras...”.

Continua diciendo Michael que: “la primera carretera que se hizo en Segovia fue de Marmajito hasta cuatro esquinas y luego al alto de Bella Vista fue hecha a pico y pala angosta y de una sola vía. Esta carretera también entraba desde Guananá por la banca hasta el pueblo. El primer carro en circular por ellas fue un carro Vaux Hall, traído por el ingeniero de minas inglés George Hill. Mas adelante se extendió el sistema vial a la Patera, Manzanillo y a San Nicolás. No fue sino hasta 1942 cuando se inauguró la carretera a Remedios y al Aeropuerto de Otú”.

La participación de la empresa en las guerras mundiales era un asunto de empresa. Dice Mr. Davey: “Los Británicos mandaban el 40% de sus salarios para la guerra, se hacían fiestas, presentaciones y bazares en el club para recolectar fondos. Se traían grandes cantidades de hilo de lana a mula por la trocha de Guacharacas desde Medellín, y todas las mujeres tejían suéteres y medias de lana, se cosía ropa, hasta ropa de bebe para enviar a Inglaterra”. Continua diciendo Mr. Davey: “recuerdo muy bien que todo lo que era aluminio se guardaba y en aquellas épocas los tubos de pasta de dientes eran de plomo y las envolturas de confites y chocolatinas eran de aluminio y se recogían y se enviaban por mar a Inglaterra. Los Británicos de la empresa también pusieron soldados, fueron llamados a filas los solteros y viajaron en 1941, me tocó su despedida en el alto de Bella Vista, se fueron a caballo por la trocha ....”.

En la década del 60, la compañía empezó a experimentar serios conflictos sociales, como la gran mayoría de empresas extranjeras en los países tercermundistas. Lo anterior fue causado por un sentimiento nacionalista que se extendía a todo lo largo y ancho de América Latina y que en Colombia tuvo matices mas complejos, si a lo anterior se le suma un precio del oro congelado por varias décadas; originó que la empresa en 1976 iniciara tramites para su liquidación. Ante esa circunstancia los acreedores, básicamente los jubilados y todos los trabajadores sin excepción se acogieron a la figura del Concordato Preventivo. Se acepto que la administración de la empresa se ejerciera a través de un representante legal nombrado por el antiguo propietario. La formula concordataria se abrió paso y entro en plena vigencia a mediados de 1977, hasta el presente.

A partir de esa fecha, los planes, programas y decisiones gerenciales tanto técnicos como administrativos han quedado en manos de ejecutivos nacionales sobre cuyos hombros recayó la responsabilidad de sacar adelante la empresa y ponerla de nuevo en marcha. Si bien el objetivo fundamental como es el de conformar el fondo de jubilados, no se ha cumplido en su totalidad; es importante destacar que se tienen uno de los fondos de jubilados mas estables del país y estamos trabajando para lograr la meta propuesta. Lo logros anteriores se han debido al esfuerzo conjunto de todo el recurso humano de la empresa, fuerza motriz que no debe desfallecer y que por el contrario nos debe impulsar con mas energía a trabajar por garantizar estabilizar nuestra empresa. De todo lo que aquí se ha expresado, nos ha permitido captar como el coraje de nuestros antepasados llevaron esta empresa a lo largo de casi tres siglos con todas las dificultades que se generaban en esas épocas, porque en estos momentos no lo podemos hacer?. Deberíamos pensar que esto seria un excelente ejercicio para demostrar a todo el país como desde nuestra empresa se pueden empezar a dar pasos de conciliación y concertación tanto a nivel interno como proyectado a la comunidad circundante. Es el momento de dejar a un lado los intereses personales, las posiciones recalcitrantes en aras de la búsqueda del bien común.

La administración de la empresa entiende que el esquema actual está fatigado y que se deben haber cambios de tal forma que nos podamos enfrentar a los nuevos retos que se dan en el entorno; coincidimos en que debe haber una completa reingeniería en la empresa; pero se debe entender, que debe haber prudencia ya que los modelos existentes no son adaptables a nuestra empresa, hay que inventar la solución optima para FGM.

A nuestros trabajadores les queremos manifestar que la administración dará todo lo que este a su alcance para estabilizar económicamente a la empresa, esta no ha sido la primera crisis de la empresa, hemos sorteado muchas y mas difíciles y todas las hemos superado. Irónicamente el presente es difícil, pero el futuro muestra un panorama mas claro y brillante. Esta es la razón de solicitarles su firme y decidido apoyo. Necesitamos incrementar productividad, tener actitud positiva, defender la empresa con un gran sentido de pertenencia, contra los factores externos. Estamos convencidos que con el concurso de todos la podemos sacar adelante y convertirnos en una empresa modelo en el país.

Es difícil entender como a la Frontino Gold Mines se le puede censurar porque no ha hecho nada por la región, esto solo lo pueden decir los demagogos y politiqueros de turno que en su afán de obtener beneficios personales, sin importarle la estabilidad de la empresa y de la región se atreven a emitir conceptos falsos y fuera de toda realidad. Los aportes de la empresa a los municipios de Segovia y Remedios son innumerables, tanto en la parte social, humanitaria, cultural, deportiva, educativa, desde el mantenimiento de vías, el control de precios en los productos básicos de la canasta familiar con el papel de la fonda como elemento estabilizador, el pago de impuestos, el auspicio a la ganadería y en general al sector agropecuario al comprar las cosechas de maíz, frijol, yuca, plátano y panela y lo mas importante la estabilidad económica de una región. Se podía pensar que seriamos sin la empresa?. Es indudable que los tiempos cambian, que las diversas fuerzas sociales y políticas interactúan en la vecindad pero la solución no es acabar la empresa, no es liquidarla, antes por le contrario es fortalecerla, respetarla, protegerla como el mas preciado tesoro. Aquí debemos caber todos, pero con respecto, con reconocimiento de los derechos adquiridos.

La empresa ha generado contactos al mas alto nivel, tanto para atraer la atención del estado sobre la situación de desempleo en la zona, como para ofrecer soluciones concretas a este y otros males que aquejan la región. Estamos trabando intensamente en conjunto con las alcaldías vecinas, con las asociaciones sindicales, con los gremios, con la comunidad, con los mineros informales en la búsqueda de soluciones, este es un compromiso de todos. La clave de todo es el respeto a la compañía. No podemos permitir mas invasiones, no podemos debilitar la empresa, con el pretexto de que no hay empleo.

Quisiera complementar mis exposición con las palabras del ilustre poeta de la raza Jorge Robledo Ortiz: “Hubo una Antioquia de mineros fuertes, de arrieros invencibles, de músculos que alzaban el futuro con vara de mimbre. Hubo una Antioquia en que las hachas eran blasones de estirpe, una tierra de granos y de espigas, de cantos y repiques, una Antioquia de azules madrugadas y de tardes apacibles”. Es triste, pienso yo, admitir que esa Antioquia parece haberse desvanecido. Hoy tenemos una de las mas altas tasas de homicidios del mundo, el numero de desplazados va en aumento, un PIB per-capita en declive, una tasa de deforestación que amenaza con dejarnos sin bosques en los próximos 20 años. Ya no hay azules madrugadas ni tardes apacibles. Nos hemos convertido en una sociedad donde la clase baja no come, la clase media no compra y la clase alta no duerme. Una sociedad a la cual parece que el dolor ajeno ya no la perturba y en la cual se levantan muros para marcar territorios, en lugar de pensar en trabajar juntos para resolver nuestros conflictos. Estas palabras nos deberían poner a meditar, nuestra empresa se encuentra en un momento coyuntural muy importante en pleno siglo XXI y si no contamos con el firme y decidido apoyo de toda la gran familia Frontino Gold Mines es difícil superar los difíciles obstáculos que nos tocará enfrentar. Roguemos a Dios para que nos ilumine y en 50 años mas, nuestros hijos estén celebrando los 200 años de fundación.

Finalmente deseo enaltecer la labor de un grupo de trabajadores que se dieron a la tarea de homenajear y rendir tributo a la empresa que les ha dado todo. Ese grupo denominado “Comité Central” ha motivado muchas personas al interior de la empresa y me ha sorprendido porque el ejercicio ha resultado todo un éxito. Pienso que nos han dado una lección de unidad, de trabajo en equipo, de no mirar atrás sino adelante todo el tiempo y de luchar por una causa con criterios propios. Sinceramente pensamos que debemos imitarlos al intentar resolver los conflictos y problemas de una forma concertada, donde predomine la estabilidad de la empresa y el bien común.

Decía Bertold Brecht, filósofo inglés:

“Hay hombres que luchan un día y son buenos
hay hombres que luchan un año y son mejores
Hay hombres que luchan muchos años y son muy buenos
Pero hay los que luchan toda la vida:
Esos son los imprescindibles”

Esos son los hombres que la Frontino Gold Mines necesita.

ELABORACIÓN DE HUERTA CASERA